Somos cada vez más las personas que utilizamos anteojos, ya sea por algún mal congénito o simplemente para leer un libro, estar frente a una computadora, o por utilizar unas gafas de sol en vacaciones o una tarde soleada. Pero déjeme preguntarle, ¿cuál es su método para mantener limpias las lentes de sus gafas? Varios … Continued
Somos cada vez más las personas que utilizamos anteojos, ya sea por algún mal congénito o simplemente para leer un libro, estar frente a una computadora, o por utilizar unas gafas de sol en vacaciones o una tarde soleada.
Pero déjeme preguntarle, ¿cuál es su método para mantener limpias las lentes de sus gafas?
Varios grupos de expertos optometristas coincidieron en que el método óptimo para quitar la suciedad de los lentes, es lavándolas con agua y jabón.
Es muy sencillo y no nos lleva más de cinco minutos. Debe rociar las gafas con agua y con una gota de jabón y frotar con suavidad el lente utilizando sus dedos índice y pulgar hasta generar espuma; nuevamente utilice agua para aclarar.
“Lo ideal es utilizar siempre productos no abrasivos como el jabón neutro para que los tratamientos de los cristales no se alteren”, recomendó Macarena Merchán Cortés, especialista óptico-optometrista.
El siguiente paso es secarlas, con un trapo de sedas acrílicas o de hilo, porque son las que mejor eliminan la humedad.
Ahora bien, sé que me va decir que no siempre tiene a la mano agua y jabón, pues en momentos de necesidad recurrimos a los pañuelos desechables, inclusive hasta con la camisa.
Para estos casos, los especialistas nos recomiendan recurrir a la gamuza que entrega el fabricante de los anteojos, pues al utilizar otro tipo de tela o los pañuelos de papel dañamos los cristales y no logramos dejarlos relucientes. Especificaron que es una solución temporal y que no sustituye al lavado con agua y jabón.
De no seguir estos sencillos pasos, ya sabemos lo que pasa, vamos a seguir padeciendo con cristales empañados o rayados.
Con información de ABC.
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