Solo tomó 4,8 segundos para que el francés Francois Gissy alcanzara su máxima velocidad en la pista de carreras del circuito Paul Ricard, cerca de Marsella. “Es extremadamente intenso, es por eso que es una verdadera hazaña”, dijo Gissy. “La bicicleta es extremadamente ligera, no hay cubierta aerodinámica y la fuerza de resistencia es extrema. … Continued
Solo tomó 4,8 segundos para que el francés Francois Gissy alcanzara su máxima velocidad en la pista de carreras del circuito Paul Ricard, cerca de Marsella.
“Es extremadamente intenso, es por eso que es una verdadera hazaña”, dijo Gissy.
“La bicicleta es extremadamente ligera, no hay cubierta aerodinámica y la fuerza de resistencia es extrema. Tal vez 200 kg de fuerza en mi cuerpo”.
La bicicleta llamada Kamikaze 5, fue diseñada por Arnold Neracher, quien explicó que el vehículo esta propulsado por un cohete con hidrógeno altamente concentrado.
Para llegar estos niveles de velocidad, antes la probaron en una serie de desafíos cada vez más rápidos.
El modelo actual utiliza peróxido de hidrógeno concentrado como combustible y plata como catalizador. Esto genera calor y el agua, la cual es expulsada en forma de vapor a través de una tobera de cohete, proporciona el impulso a la bicicleta.
Esto proporciona una alternativa más segura que los motores con cohetes normales, que normalmente queman a la vez, dos químicos diferentes.
“En la bicicleta es todo o nada. Es un desafío técnico, no solo la velocidad por la velocidad”, añadió Gissy.
Asumiendo que encuentre un patrocinador, el piloto francés espera acelerar a 402 km/h o más en menos de dos segundos, con un nuevo diseño llamado Spine Crusher.
Para ello, explicó que tendría que mezclar dos sustancias: peróxido de hidrógeno y queroseno o aceite vegetal.
“Sería más caro, pero una vez que esté construido, el combustible costaría menos porque consumiría alrededor de la mitad de la cantidad de peróxido de hidrógeno. Sería mucho más espectacular. Un montón de ruido con enormes llamas de 3 metros”. Pero advierte que “no necesariamente tendrá un mejor rendimiento”.
El piloto de 32 años de edad y ex conductor de autobús, añadió que necesitará realizar pruebas en un túnel de viento antes de volver a la pista, debido al aumento de las fuerzas G que la bicicleta experimentaría.
“Tienes que tener un equilibrio perfecto, de lo contrario, la bicicleta estará en el aire y se volteará”, advirtió.
Por lo pronto, Francois Gissy ya cuenta con el récord de velocidad (antes era de 286 km/h) y ya se prepara para imponer una nueva marca.
Con información de BBC