Una alternativa para bajar los niveles de estrés generados por las actividades diarias es la lanaterapia, la práctica de tejer a mano. En la actualidad, esta actividad de tejer prendas de lana no es exclusiva de nuestras abuelas, pues se ha convertido en todo un fenómeno social del que podemos obtener grandes beneficios. 1. Ejercitamos … Continued
Una alternativa para bajar los niveles de estrés generados por las actividades diarias es la lanaterapia, la práctica de tejer a mano.
En la actualidad, esta actividad de tejer prendas de lana no es exclusiva de nuestras abuelas, pues se ha convertido en todo un fenómeno social del que podemos obtener grandes beneficios.
1. Ejercitamos los dos hemisferios cerebrales
La complejidad del tejido que se esté elaborando abona a nuestra coordinación cerebral. La destreza mental irá potenciando aún más ese ritmo.
Se ha comprobado que niños con problemas psíquicos encuentran mejoría al obligarse a focalizar su atención en una actividad como tejer.
2. Reduce el estrés
Tejer es una actividad que se puede realizarse en grupo, ya sea con amigas, vecinos o un grupo creado por expertos en esta habilidad.
Esto nos ayuda a exteriorizar nuestros problemas con otras personas, así como socializar o iniciar nuevas amistades.
3. Tejer mejora nuestro estado anímico
Así como podemos tejer acompañados, también los podemos hacer en soledad y sin salir de casa.
Se puede crear un ambiente y tranquilo que ayudará a disfrutar del tejido al tiempo que incrementa la dosis de endorfinas capaces de relajarnos y de darnos una grata sensación de bienestar.
4. Mejora nuestra motricidad manual
El ejercicio de tejer nos obliga a tener las manos en movimiento y a evitar que se queden agarrotadas o rígidas. Moverlas las hace entrar en calor y, de ese modo, el dolor es más liviano y se nota menos. Vale la pena practicar este sano ejercicio, al menos, durante una hora al día. De ese modo, el sufrimiento por la artritis, por ejemplo, puede suavizarse un poco.
Indicarte también que en el caso de los niños, está probado que tejer mejora su motricidad fina. Les ayuda además a mejorar la escritura y a ser más hábiles.
5. Tejer eleva nuestra autoestima
Además de ser un pasatiempo, la actividad de tejer nos impone objetivos como conseguir ese chaleco de moda para el otoño o los guantes y bufanda para los regalos de Navidad.
Además recuerdemos que dar un regalo elaborado con nuestras propias manos, en donde se vea reflejado nuestro arte e imaginación, siempre es bien agradecido. Esa aceptación o gratificación a nuestro trabajo sin duda eleva nuestra autoestima.
Con información de mejorconsalud.com