Llama la atención el esfuerzo que se hace para intentar convencer de que el nuevo gobierno ya está cumpliendo compromisos. Poner a la venta el avión presidencial no fue suficiente para poder cambiar a México, hoy día vemos a un Presidente que le interesa más tomarse fotos dentro del avión comercial, aunque su tiempo se … Continued
Llama la atención el esfuerzo que se hace para intentar convencer de que el nuevo gobierno ya está cumpliendo compromisos.
Poner a la venta el avión presidencial no fue suficiente para poder cambiar a México, hoy día vemos a un Presidente que le interesa más tomarse fotos dentro del avión comercial, aunque su tiempo se pierda en los cotidianos retardos de las aerolíneas mexicanas.
Hoy día vemos un Presidente que se detiene a tomarse un jugo en las carreteras de Veracruz destacando el trabajo de un hombre que a eso se dedica, que bueno, pero no se ve que ayude en nada.
Hoy día vemos a un Presidente ofreciendo conferencias de prensa de hasta dos horas, intentando convencer que sus conceptos son los mejores para el país.
En fin hoy día seguimos viendo un Presidente como si estuviera en campaña, dejando por un lado los temas primordiales del país que aún no se les ve resultado.
Podrá seguir subiendo en aceptación por parte de los mexicanos de acuerdo a ciertas encuestas, pero eso no significa que México vaya en la dirección correcta o que nuestro país mejore en algunos de sus puntos débiles.
El tema financiero sigue siendo una incógnita, se comienza a gastar más de lo que se tiene y los analistas ya mandaron sus mensajes, pero eso no interesa al nuevo gobierno que presume que tiene todo controlado.
Expertos en la materia nos advierten que los gobiernos populistas tienen dos años de gracia en donde seguramente tendrán buenos resultados, pero eso sucede hasta que se acaba el dinero.
Como en esas familias que viajan, compran lo que no se necesita y ni el el papá ni la mamá tienen trabajo, se endeudan sin pensar en el mañana.
Esta época ya la vivimos, con la enorme diferencia de que existía un respaldo llamado petróleo. Hoy nada respalda a México, por el contrario, las puertas financieras se cierran drásticamente.
Promesas cumplidas como abrir los Pinos al pueblo, es solo populismo puro para seguir abriendo la llaga y ponerle limón, llevando familias pobres para que vean cómo vivían los políticos de “antes”.
Tonterías que solo muestran una incapacidad de resolver lo que realmente urge.
Alguien escribía que México es el país del pasado, pues todo gira en torno a lo que sucedió, pero también se pide que se vea y que se atienda el presente y el futuro.
El decir que combatiendo la corrupción será suficiente para cambiar no es correcto, por el contrario es simplemente estirar la liga hasta que reviente.
El problema se sigue llamando inseguridad, pobreza, promesas incumplidas y abandono total del esquema financiero y empresarial.
México va en caída libre, con mecanismos de engaño y de esperanza fallida, México está en problemas y no lo quieren reconocer, es por ello que no tenemos “nada que presumir”
De ida
Llegó Guillermo Padrés a Sonora y no precisamente fue la noticia más grata de que se tenga memoria.
Muchos de sus “amigos” y colaboradores lo recibieron en el aeropuerto, pero las redes sociales fueron lapidarias con él.
Será interesante ver su posición y saber cómo justificar todos esos señalamientos que se le imputan y que lo tuvieron más de dos años en la cárcel.
También será interesante conocer hacia donde dirigirá su vida, si a recuperar parte del tiempo perdido o buscará posiciones políticas.
El PAN Sonora está en un dilema, sí regresar con su antiguo jefe político o intentar recuperar el terreno perdido y buscar limpiar esa imagen de corrupción que se han ganado en los últimos años.
Las próximas semanas serán claves para ver lo que le depara a Padrés y a su todavía partido político.
De vuelta
Un grupo empresarial propone comprar el estadio Héctor Espino para construir un centro comercial y un desarrollo inmobiliario.
La idea no es mala si la vemos desde el punto de vista de generación de empleos e inversión a Hermosillo.
El tema es que nuestra ciudad lo que requiere es combatir la enorme drogadicción y vicios que la aquejan y por lo mismo le urgen más espacios deportivos abiertos a todo público.
De ahí que de nueva cuenta se recuerde la gran oportunidad de hacer un complejo deportivo que atienda las necesidades de nuestra ciudad.
Hermosillo no necesita más centros comerciales, requiere de espacios en donde los jóvenes se olviden de las drogas que les venden en cada esquina.
Eso sí sería una gran inversión y con eso si se trasciende en la vida y en la política.
Aserrín
Se veía venir y ya renunció Ricardo Bours Castelo al PRI, se va sin resentimientos, así lo dice, pero se va por la poca apertura de ese partido.
Para el buen entendedor se advierte que Ricardo buscará ser un candidato independiente, pero también se aprecia que Ernesto Gándara se queda solo en la contienda.
Ahora solo falta saber si el popular “borrego” buscará acuerdos con quienes se ha distanciado en los últimos años o se quedará con lo que tiene.
Víctor Mendoza Lambert Director de Grupo Entre Todos.
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