Faltan tres meses para que el Congreso de la Unión entre en la definición de la nueva reforma del Estado
Faltan tres meses para que el Congreso de la Unión entre en la definición de la nueva reforma del Estado. En las comisiones que habrán de construir un dictamen consolidado hay más de 120 iniciativas… y contando. ¿La más reciente? La instauración de un nuevo calendario para el trabajo legislativo, que implicaría convocar a un tercer periodo ordinario de sesiones, entre mayo y agosto de cada año.
Eso o seguir el modelo de otras naciones europeas y establecer un periodo anual de sesiones, con trabajos ininterrumpidos, de acuerdo con el planteamiento del presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Martí Batres Guadarrama.
En los prolegómenos de la reforma del Estado de la Cuarta Transformación, sólo se escuchó la voz de la mayoría morenista ayer en el Palacio Legislativo de San Lázaro. Un concierto vocal —para ser precisos— con mensajes dispersos, incluso contradictorios.
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, insistió en el llamado a actores políticos para construir una iniciativa, sin prisas, pero sin pausas. “Debe darse espacio y tiempo al diálogo para encontrar juntos, con el mayor consenso posible, los mejores caminos y las mejores soluciones, para que el sistema electoral y sus instituciones, se transformen en la dirección y sentido que reclama el México del siglo XXI”.
El coordinador de la mayoría en la Cámara de Diputados, Mario Delgado, dio los primeros brochazos de la “verdadera democracia”: cortar a la mitad las prerrogativas que actualmente reciben los partidos políticos, “optimizar” el gasto en los órganos electorales, armonizar la ley para sancionar a quienes se atrevan a manipular la voluntad electoral, reducir el tamaño del Congreso, incorporar la revocación de mandato al texto constitucional, establecer nuevas reglas para la democracia participativa.
“Tenemos que reformar el Artículo 35 para facilitar la realización de las consultas (populares)”, complementó Martí Batres. “Las solicitudes han topado con pared: ahora mismo tenemos siete candados que ni Houdini puede abrir”.
El líder de la Cámara Alta públicamente respaldó la propuesta de rescindir los OPLES y dejar al INE como único organizador de las elecciones, además de incluir entre los asuntos por definir, la reforma al Poder Judicial. ¿Y establecer la elección directa de los ministros? “No debemos descartar la intervención ciudadana en estos asuntos”, definió Batres. “Ésa debe ser la esencia: la mayor intervención de la sociedad en los asuntos públicos”.
La política de austeridad administrada al aparato burocrático también debe implantarse al sistema de partidos, insistieron los líderes parlamentarios de Morena. Aunque el presidente de la Mesa Directiva del Senado matizó su apoyo a la propuesta de reducir curules y escaños. “No debe desaparecer la representación proporcional y, en todo caso, deben analizarse las fórmulas para reducir el tamaño del Congreso”, acotó.
Entre los participantes en la jornada inaugural de los foros de parlamento abierto sobre la reforma electoral destacaron el líder de la mesa directiva de San Lázaro, Porfirio Muñoz Ledo, y el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdoba Vianello. Uno, desde la trinchera partidista. El otro, desde la academia. Ambos han intervenido en la confección de las sucesivas modificaciones al marco legal desde 1996 hasta el 2014.
Muñoz Ledo aludió a las 4F —financiamiento, fiscalización, fraudes y fallos— que deberán revisarse, dentro del sistema electoral. “¿Lista nacional? Sí, porque desde los diputados de partido de López Mateos venimos fatigando las posibilidades de representación”, se pronunció respecto al sistema representativo, “durante mucho tiempo jamás nadie se preocupó —más que la oposición— de que se siguiera cometiendo el fraude. ¡Mucho fraude y bonita representación! Es la verdad histórica de las cosas”.
“A la democracia hay que cuidarla permanentemente”, definió en su turno Córdova Vianello. “Si no, cuando menos nos demos cuenta —eventualmente sin quererlo o sin percatarnos— la habremos perdido”, concluyó.
En la mira de la reforma morenista: el INE, según la versión filtrada de la iniciativa que promovería la mayoría parlamentaria. En realidad —como fue evidente ayer— también el aparato legislativo y el Poder Judicial sufrirían una drástica reducción, por la austeridad republicana.
“Si lo que se quiere es reducir los costos, no necesitamos revisar el modelo electoral, sino repensar algunos aspectos del mismo, como las fórmulas para determinar el financiamiento público que se otorga a los partidos a nivel nacional y local; la duración de las campañas electorales y avanzar hacia el voto electrónico”, recomendó el consejero presidente del INE, “nadie está contra la austeridad, pero lo primero en lo electoral, no nos equivoquemos, es cuidar la certeza”.
EFECTOS SECUNDARIOS
INCLUSIONES. Sin oficiales de la Secretaría de Gobernación, quedó integrado el grupo interdisciplinario encargado de contener las caravanas de migrantes procedentes de Centroamérica. Además de los mandos responsables de las Fuerzas Federales, destacan altos funcionarios que forman parte del primer círculo del lopezobradorismo. Entre ellos, los subsecretarios Horacio Duarte y Javier May (originario de Comalcalco, Tabasco); Lázaro Cárdenas Batel y Francisco Garduño, quien hace dos semanas estaba preparado para dejar la dirección de los Penales Federales para hacerse cargo de las Aduanas pero finalmente, el Ejecutivo federal decidió enviarlo al sureste del país. ¿Y el equipo de Alejandro Encinas? Nadie sabe…
DILATADOS. Han pasado 15 días del arribo del maestro Víctor Manuel Toledo a la Semarnat y la reestructuración de la dependencia en ciernes. Acéfala, entre otras, la dirección general de Impacto y Riesgo Ambiental lo que obligó a suspender las evaluaciones de impacto en curso. La consulta pública sobre el proyecto minero de Almaden Minerals en Ixtaca, Puebla, tendrá que postergarse dos semanas.