Aquí solo pueden ser dos cosas: el presidente reacciona y se dedica a recomponer; o que comience a reaccionar con populismo y el problema sea mayor
El tema López Obrador es y seguramente seguirá siendo lo medular de los comentarios en muchos lugares de nuestro país.
En las oficinas, en las casas, entre amigos y amigas, entre familia, en donde se encuentre uno, se habla de Andrés Manuel López Obrador.
Y déjeme decirles que no precisamente se habla bien de su gobierno, ni de su persona, tampoco se habla bien de sus mañaneras y mucho menos se habla bien de las decisiones que hoy día está tomando.
Una enorme decepción se identifica entre quienes hablan de su baja popularidad, o de quienes comentan el tema financiero de nuestro país. Y mucho menos se habla bien de la seguridad o más bien la inseguridad en la que vivimos.
Hablar de López Obrador es hablar de inconsistencias, es identificar lo que en su primer año fue una fortaleza, en su segundo se ha convertido en una crisis de imagen, me refiero a las mañaneras.
Sus “dicharacheras” frases ya no hacen reír a nadie, ya no son tema y ya se ven hasta ridículas.
Sus cortinas de humo como la lotería para vender el avión son de dar pena ajena. Las rechiflas recibidas en su estado natal y los señalamientos por la falta de claridad en sus conceptos crecen día a día, así como el malestar por sus promesas incumplidas.
Muchos de esos que votaron por algo diferente, se ven arrepentidos y no solo ellos, algunos convencidos que incluso han recibido algún beneficio como trabajo o negocios ya lo señalan y ya lo cuestionan.
Su popularidad, por más que busquen empresas que le den mejores números nada tiene que ver con lo que tenía hace un año, su caída es clara, es rápida y es permanente.
Su equipo de trabajo se desgasta de forma alarmante y no se ve que logren madurar para tomar decisiones y hacer bien las cosas.
Los gobernadores de Morena o sus aliados son los peor calificados en el país y eso que apenas llevan meses en el poder. Me refiero a Tabasco, Baja California, Morelos, y por supuesto Puebla, ninguno de los gobernadores aprueban. Todos, sí, todos están reprobados y con pésimos resultados.
Es así como podemos identificar la decepción mayor a solo poco más de 15 meses de gobierno.
Las marchas en todo México siguen creciendo, el malestar es auténtico y la decepción es real.
Otros partidos comienzan a retomar cierto crecimiento, no todos, destacan el PAN y Movimiento Ciudadano, solo ellos, el PRI decidió aliarse a Morena y con ello perder prácticamente todo.
Este segundo año de gobierno de López Obrador, será determinante para saber el rumbo de los siguientes cuatro, pero si por la víspera sacamos el día podemos entender que nada bueno le depara a nuestro país.
Los empleos esperados no han llegado, las inversiones tanto externas como internas tampoco se ven, la desconfianza hace presencia. La seguridad no se logra retomar, la salud que era un tema controlado, ahora es un pendiente mayor.
Así las cosas, el escenario de nuestro país es delicado y hasta peligroso.
Ya veremos que sucede, y aquí solo pueden ser dos cosas, la primera que el Presidente reaccione y se dedique a recomponer lo que se ha pretendido cambiar, cosa que se ve muy complicada. Y la segunda que comience a reaccionar con populismo y el problema sea mayor.
Cualquiera de las dos acciones que se tomen de algo podemos estar seguros, las cosas no van a mejorar nada rápido y el riesgo es caer y caer hasta tocar fondo en muy pocos años.
De vuelta
El tema de la marcha de las mujeres y de “El nueve nadie se mueve” se ha convertido en una piedra en el zapato del Gobierno Federal.
Al final del día han intentado sumarse al movimiento, pero es tarde, las primeras reacciones cuando AMLO desestimo la acción y quiso culpar a grupos feministas no afines a él, fue suficiente para que muchas mujeres se molestaran y señalen al Presidente de machista. Ni modo, así son las cosas.
De vuelta
Y en este tema de la parálisis de actividades por las mujeres mexicanas, les puedo asegurar algo, es real y es intensa, los hombres lo vemos con nuestra esposa, hijas, amigas, compañeras de trabajo, todo es real y el fin es buscar respeto a la mujer y apoyo a las mismas para evitar sean agredidas, solo por el hecho de ser mujer. Pero no tengan la menor duda es un movimiento legítimo, muy legítimo.
Aserrín
Muchas gracias a todos los amigos y amigas que estuvieron con la familia para recordar a mi hermano Javier quien ya descansa en PAZ.
Me di a la tarea de leer todos los mensajes en diferentes medios y formatos y se agradece de corazón.
Víctor Mendoza Lambert director de Grupo Entre Todos.
Correo: [email protected]
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