Su flota de barcazas y remolcadores acumula un año de operaciones intermitentes y un promedio de 360,000 toneladas transportadas a la Isla de Cedros, donde estará AMLO este fin de semana
Andrés Manuel López Obrador estuvo hace 82 semanas en Guerrero Negro. Aquella pequeña y alejada comunidad de apenas 15,000 habitantes perteneciente al municipio de Mulegé, en Baja California Sur, recibió a un presidente de la República por primera vez.
La importancia estratégica de este localidad justifica los esmeros presidenciales. La laguna Ojo de Liebre colinda con la mina de sal a cielo abierto más grande del mundo. Y enfrente, la Isla de Cedros, donde cargan los buques de Mitsubishi para llevarse la materia prima a Japón.
Hace año y medio, AMLO conoció las instalaciones de ESSA y ordenó a la entonces secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, limpiarla de corrupción y hacerla más rentable. Este fin de semana, el Ejecutivo recorrerá el puerto de Cedros —donde viven apenas un millar de personas— y podrá constatar si sus instrucciones fueron cumplidas a cabalidad.
Entonces, en el SAT despachaba Raquel Buenrostro, actual titular de la SE. La instancia fiscal —en una decisión polémica— ordenó embargar las cuentas de la empresa paraestatal para exigir la liquidación de los créditos fiscales derivados de los ajustes al precio del producto registrados entre el 2008 y 2013, inclusive.
Desde entonces, la compañía está inmersa en una maraña de litigios mercantiles y laudos laborales que la tienen al borde de la quiebra.
Sin una cartera de clientes —Mitsubishi es dueña de 49% de las acciones y cuenta con un contrato de exclusividad para adquirir la producción— y con pérdidas financieras por la fluctuación del tipo de cambio, ESSA nuevamente atraviesa por un periodo crítico.
Su flota de barcazas y remolcadores acumula un año de operaciones intermitentes y un promedio de 360,000 toneladas transportadas a la Isla de Cedros, donde estará AMLO este fin de semana. La producción se ha visto afectada por obsolescencia de los equipos y la maquinaria, costos elevados de mantenimiento, pagos excesivos por demoras y personal “fuera de cuadro”.
El gobierno mexicano y el consorcio nipón también están asociados en Baja Bulk Carrier. La secretaria Buenrostro quiso aplicar en ESSA la misma solución que en la Financiera Rural, pero el personal desplegado en Guerrero Negro no ha dado el ancho. Para preparar la visita presidencial por Guerrero Negro pasaron la secretaria de Economía, hace dos semanas, y el coordinador de los programas federales, Carlos Torres. En vísperas de la visita presidencial a Mulegé, también estuvo en tierras sudcalifornianas el titular de la Sedatu, Román Meyer Falcón, quien estuvo acompañado por el gobernador morenista Víctor Manuel Castro.
Efectos secundarios
RESONANCIAS. En el encuentro que tuvieron el ministro Javier Laynez y las ministras Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz con integrantes de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, se abrió una ventana interesante para discutir el tema del presupuesto, donde más se requiere. El diputado Rubén Moreira puso el énfasis en los magistrados, jueces y actuarios en las entidades federativas, que trabajan en condiciones difíciles, con sueldos nada elevados, sin garantías en el desempeño de sus funciones, con amenazas del crimen organizado y presión de los gobernadores. Si esto no se revierte, si no se otorgan mayores recursos a la justicia local, será muy difícil garantizar una acción eficiente para enfrentar la inseguridad.