Y no importa una boa decapitada, ni si su cabeza se conserva en formol, una cárcel o un discreto asilo de criminal protegido. Ismael Zambada ya está acostumbrado a esa condición
Sin siquiera imaginarlo, el notable grabador mexicano José Guadalupe Posadas dio hace más de un siglo consistencia y fundamento a dos mexicanas entidades sólidas: la calavera catrina como reina del juego del Día de Muertos, y la escuela del cartonismo político mexicano.
De Alberto Isaac, Arias Bernal y Abel Quezada, al genial Pancho Calderón de hoy, todos se nutrieron de la fuente ingeniosa de saber trasladar a los monos -cubistas en Isaac, simples en Rius y Quezada, casi retratos en Luis Carreño, y su hijo y heredero, de pluma detallista con Naranjo- el pensamiento crítico. Lo mismo las crónicas marcianas de Trino o todos los moneros de la revista La Garrapata, “el azote de los bueyes”.
Cuento todo esto, porque el título de hoy me lo fusilé del excelente cartón de Jabaz de ayer en mi diario Milenio, a partir de la deposición del Mayo Zambada en Nueva York confesando su amplísima y exitosa carrera criminal en el campo del narcotráfico durante casi cincuenta años. Todo mundo se declaró sorprendido por las verdades confesadas en menos de diez minutos ante el juez que ahora tendrá que creerle todo, antes de dictar sentencia el 13 de enero.
Es que es la boa. ¿Recuerdan? La Sonora Santanera nos contó que todos lo conocen por Panchito, pues parece un maniquí, pero baila el nuevo ritmo que todos lo saben. Es la boa.
“Y los locutores, lo saben, lo saben, y los periodistas, lo saben, lo saben, todos los del Poli, lo saben, lo saben…”
Todos sabían la trayectoria y el triunfo del Mayo Zambada, no se hagan. Todo Culiacán sabía que hacía, dónde estaba y a donde se mudaba. No solamente sus vecinos en las serranías del llamado triángulo dorado, donde mantenía guaridas pasajeras bien protegidas por el silencio. Y la complicidad.
Y lo sabían los alcaldes, gobernadores, jefes de zona militar de todos estos años. Lo saben los empresarios. Y lo sabían los policías, grandes, medianos y altos mandos. Y lo sabían grandes jefes de uniformes varios, pero con abundantes adornos sobre los hombros o en los kepis y las gorras. Todos lo saben, porque todos cobraban sobornos de calibre variado que pagaba Ismael Zambada. Según el sapo…
Todos los gobernadores que han pasado por el palacio de gobierno de Sinaloa, lo sabían, lo sabían. Lo sabe, lo sabe, el gobernador actual Rubén Rocha Moya, quien con semanas de antelación fue convocado a la reunión de acercamiento -la gran trampa- entre el chapito Joaquín Guzmán López y el Mayo, que terminó en un vuelo especial a los terrenos de El Paso, Texas, y la cárcel para ambos. Tan lo sabía, que a semanas de distancia pidió que lo excusaran por no asistir a esa junta. Alegó motivos de salud, el muy vidente.
Lo supieron todos estos años los corruptos agentes aduanales norteamericanos de La Mesa, El Paso, Eagle Pass, Laredo, Hidalgo o Port Isabel, por cualquiera de los puertos de entrada por donde pasaban los miles de kilos de droga. Lo saben los que llevaban la mercancía a Chicago, Nueva York, Los Ángeles o hasta el menor de los mercados. Lo saben, lo saben.
Los que están leyendo, lo saben, lo saben. Los que se hacen locos, lo saben, lo saben. Los expresidentes, lo saben, lo saben. A juzgar por lo que campechanamente dijo ayer por la mañana, la única persona inmune a este saber generalizado, es la señora Claudia Sheinbaum. Por eso ahora pide que todas las revelaciones de la corrupción que benefició al Mayo vengan acompañadas de pruebas ante la Fiscalía General de la República.
Es la boa.
Y no importa una boa decapitada, ni si su cabeza se conserva en formol, una cárcel o un discreto asilo de criminal protegido. Ismael Zambada ya está acostumbrado a esa condición.
Esta clase de reptiles tienen la facilidad de generar nuevas cabezas.
PILÓN: PARA LA MAÑANERA DEL PUEBLO (porque no dejan entrar sin tapabocas): “Es un hombre recto” dijo la señora presidente del abogado Néstor Vargas Solano a quien nombró representante de la Presidencia ante el poderoso Órgano de Administración, la nueva oficina que se encargará de que los jueces se porten bien. La señora Sheinbaum lo debe conocer bien, porque el señor Vargas Solano trabajó en elJurídico del DF cuando doña Claudia era la gobernadora. También debería saber que en el 2022 Varas Solano fue formalmente acusado por una Tania “N” de acoso sexual. Si quiere más datos pida el expediente que se abrió entonces y que se identifica así: CI-FIDS(FDS-6-01/01880/11/2022. Se lo puede pedir a Ernestina Godoy Ramos, quien es hoy su Consejera Jurídica en presidencia; en aquel 2022, doña Ernestina era la Fiscal General de Justicia en la capirucha.