Ya vimos durante las últimas horas cómo el peso perdió terreno frente al dólar y subió desde esos niveles de los 16.80 de regreso a los 17
Era de esperarse que el arranque de este 2024 sería turbulento en ese proceso de aterrizaje de la política monetaria restrictiva, en especial la de Estados Unidos, sobre todo porque hasta ahora… ¡nadie ha hablado realmente de un aterrizaje!
En nuestro país, el Banco de México se enredó un poco con la emoción de algunos de los integrantes de la Junta de Gobierno que vieron con mucho entusiasmo los datos inflacionarios del verano y parte del otoño, por lo que algunos anticipaban bajas a la tasa de interés de referencia en el corto plazo.
Pero la realidad, terca como es, ha dejado en claro que ese cierre del 2023 del Índice Nacional de Precios al Consumidor en México en 4.66% no está todavía como para andar con las tijeras en la mano.
Mientras tanto, en Estados Unidos, el propio presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, habla en fedish y no acaba de tener claridad sobre el rumbo que debería tomar la política monetaria estadounidense.
Para entenderlo mejor, por ahora en la Fed prefieren cantinflear o hasta jugarle a la Chimoltrufia, que como dicen una cosa, dicen otra.
Y si no hay señales claras en el discurso sobre el futuro de la política monetaria en aquel país, lo que queda es estar al pendiente de los datos que generen sus propias señales sobre el camino a seguir.
Evidentemente que el indicador más importante es el propio Índice de Precios al Consumidor que debe confirmar si se mantiene la tendencia de desinflación.
En Estados Unidos también pesan los datos de empleo y consumo, que por ahora son favorables.
La lectura de los datos inflacionarios va más allá del índice general, evidentemente que la inflación subyacente marca una trayectoria de más largo plazo, pero hay subíndices que pueden indicar si ya se compró la idea de una inflación a la baja.
Todo eso es lo que puede ayudar a cambiar sutilmente el discurso para esperar después decisiones en la propia política monetaria.
La fecha para conocer el dato del cierre inflacionario del 2023 finalmente llegó este jueves.
El dato anualizado de la inflación general hasta noviembre de 3.1% volvió a animar las expectativas de una no tan lejana baja inicial de las tasas en Estados Unidos y por ello tanta expectativa con este dato de hoy.
Evidentemente que un solo número, sea bueno o malo, no será suficiente para un cambio brusco en el discurso, pero puede influir en que haya matices en las palabras de los tomadores de decisiones y se pueda anticipar con mayor claridad cuándo empieza el regreso de la tasa de referencia hacia una eventual neutralidad.
Ya vimos durante las últimas horas cómo el peso perdió terreno frente al dólar y subió desde esos niveles de los 16.80 de regreso a los 17.
Suena a una perogrullada, pero el peso no perdió terreno en esta ocasión, fue el dólar el que tuvo ganancias en los mercados financieros. La diferencia es que la moneda mexicana se sube al tren de las expectativas que ha generado el dato que conoceremos hoy sobre los precios en Estados Unidos.