Estos también son días en los que los defraudadores aprovechan para engañar a muchos ilusionados, crédulos y ansiosos consumidores del Buen Fin
Dicen los psicoterapeutas que es buena idea sentarse y con calma escribir los sentimientos para que de esa manera se pueda reflexionar sobre la conducta personal y evitar actos impulsivos.
Bueno, como consejo de finanzas personales hoy es un buen día para sentarse con calma esta mañana y escribir de forma sensata qué es lo que realmente necesitaría comprar en este Buen Fin y con ello tratar de evitar los arrebatos sentimentales que lo lleven a gastar de más durante estos próximos cuatro días.
Y es que algunos lo recordarán, otros tendrán que preguntar a los abuelos, pero hace no mucho tiempo para hacer una compra era necesario hacerse de un tiempo libre para ir hasta la tienda, eso daba cierta oportunidad para hacer alguna planeación financiera sobre cómo enfrentar un gasto fuerte para un presupuesto familiar.
El proceso de decisión de compra de un consumidor (buyer’s journey, como se ha estudiado en Estados Unidos) incluye, de acuerdo con los expertos en esos temas, cinco pasos que son el reconocimiento de la necesidad de un producto o servicio, la búsqueda de información; la evaluación de las opciones comparables; la compra y la evaluación posterior a la compra.
El Buen Fin abre una buena ventana de oportunidad para decidir una compra, sólo hay que darse el tiempo para tener un buen proceso de análisis.
El problema es que no son pocas las personas que entre hoy y el lunes tendrán a flor de piel los sentimientos de omnipotencia consumidora y combinarán dos herramientas tan poderosas como peligrosas: la capacidad de financiamiento al consumo y el acceso inmediato a las compras en línea.
No es casualidad que durante las semanas recientes no pocos clientes de tarjetas de crédito recibieron la oferta de sus bancos de aceptar, porque tiene que ser con el consentimiento del acreditado, incrementos en sus líneas crediticias.
Y el acceso a poder comprar lo que sea desde un teléfono inteligente, desde una pizza hasta un automóvil, hace de la tentación del Buen Fin un arma de dos filos. En muy pocos pasos y literalmente en segundos se pueden hacer compras francamente caras.
La Asociación Mexicana de Ventas en Línea estima que ocho de cada 10 internautas tienen planes de hacer alguna compra en este Buen Fin.
Y las razones son que 68% estima que deben aprovechar los descuentos y promociones, otro 54% cree que aumenta la variedad de productos y servicios y 44% cree eso de que realmente es el fin de semana más barato del año.
Así que, en este mismo momento hay muchos consumidores con el teléfono móvil en una mano y la tarjeta de crédito en la otra, listos para disparar firmas electrónicas en toda clase de ofertas del Buen Fin.
Si no está entre sus habilidades como consumidor el poder hacer un alto y reflexionar sobre los impulsos de consumo, si cree que es de otra generación tomarse el tiempo de ver físicamente lo que piensa comprar, al menos hay que estar seguros de que vamos a dar nuestros datos financieros a un sitio seguro de compras.
Estos también son días en los que los defraudadores aprovechan para engañar a muchos ilusionados, crédulos y ansiosos consumidores del Buen Fin.