En esa nebulosa está, entre otras cosas, la inmediata ejecución del atacante y los leves castigos que se impusieron a los agentes del FBI, encargados del cuidado del presidente y acusados de negligencia : si acaso, 25 días de suspensión sin paga
Se acaba de cumplir un año del atentado en Pennsylvania que dejó a Donald Trump con una leve herida en la oreja derecha, el cuerpo acribillado de su agresor, y muchas dudas que forman parte hoy de la nebulosa que envuelve a la situación del presidente de los Estados Unidos.
En esa nebulosa está, entre otras cosas, la inmediata ejecución del atacante y los leves castigos que se impusieron a los agentes del FBI, encargados del cuidado del presidente y acusados de negligencia : si acaso, 25 días de suspensión sin paga.
El otro asunto grueso, causane de polémica, tiene que ver con un famoso cadáver que -mediáticamente- sigue en el misterio del closet, el de Jeffrey Epstein. Epstein fue un agente financiero norteamericano que pasó a las noticias por su repetida relación con la pedofilia y la prostitución de menores de edad, a veces niñas de 14 años, que frecuentemente invitaba a sus fiestas en las que las proporcionaba a sus “amigos”, entre los que supuestamente figuran importantes políticos e incluso un miembro de la realeza británica, según se afirma.El proxeneta pedófilo Jeffrey Epstein falleció en su país en la cárcel hace seis años. El informe oficial dice que suicidó ahorcándose en su celda.
Pam Bondi, la muy dura fiscal general norteamericana y Dan Bongino, subdirector del FBI han entrado en franco choque. La fiscal, y en consecuencia el Departaamento de Justicia, decidieron dar el caso Epstein por cerrado, negando así la suposición de que existe una “lista de clientes” del muerto; famosos por cierto. Bongino se opone.
No ha mucho, Elon Musk publicó en la X de su propiedad que el presidente no quiere que se publique esa lista porque aparece en ella. Luego borró el mensaje.
Simultáneamente, el presidente Trump ha decidido -independientemente de su conversación ayer lunes con el director de la OTAN– proporcionar a Ucrania cohetes Patriot de mediano alcance para su guerra con Rusia. En torno al asunto, Trump dijo sobre Vladimir Putin su versión del dicho de un personaje de Gómez Bolaños: no me simpatiza.
En otros numerosos frentes, la administración tiene el asunto de los aranceles, que los socios comerciales de los Estados Unidos, incluyendo México desde luego, consideran desmedidos, injustos y finalmente perjudiciales para todos. Si se agrega la secularmente imposible paz entre judíos y palestinos, con decenas de muertos al día que estaban formados en espera de asistencia alimentaria básica en la franja de Gaza, el gobierno de los Estados Unidos, que había anunciado la facilidad con la que se podía resolver los coflictos de Ucrania y Medio Oriente en cuestión de minuto o días, no la tiene fácil.
Lo cual lleva a los mal pensados a creeer que toda esta ristra de conflictos solamente tiene la intención de desviar la atención de los norteamericanos de las consecuencias que en su bolsillo tendrá la gran reforma fiscal del presidente Trump.
PARA LA MAÑANERA DEL PUEBLO (porque no dejan entrar sin tapabocas): ¿No es excesivo el optimismo de la señora presidente, de que podrá en dos semanas llegar a un acuerdo con la adminisración Trump para reducir los aranceles anunciados para México a partir del 1 de agosto?
Yo creo que sí.
Pero deseo que no lo sea.