Como Cuitláhuac todavía se cree rey mexica anunció que, porque así se le pega la gana, dará su sexto Informe de gobierno en el municipio de Veracruz el 18 de agosto
Cada vez que el presidente de la república levanta la mano del gobernador de Veracruz, ofende a sus habitantes. El desgobierno del ingeniero, cuyo mayor mérito es que ya se va, choca con la percepción del primer mandatario.
El hecho de que, como dijera la mañana del 1 de agosto, no es “rata” Cuitláhuac García, pero esto no es suficiente para ser honesto o un buen gobernador; hace falta mucho más, sobre todo vocación política, conocimientos y sensibilidad humana.
Ser honesto no es una virtud en la administración pública, es una obligación, sobre todo si se pertenece a Morena, cuyos principios son tres conceptos que deben respetarse “No mentir, no traicionar y no robar”. Tampoco justifica tantas felicitaciones el hecho de que en la entidad no haya habido gobernadores dignos de la confianza de los ciudadanos.
Es una cuestión de enfoques, y lo que pasó ya no tiene remedio, lo que sí tiene remedio es la injustificada alabanza del presidente hacia una persona tan mediocre que ni siquiera llegó a gobernar. No es ni siquiera un mal gobernador porque nunca gobernó.
Las flores que le procura López Obrador al gobernador de Veracruz son de muerto. Condenado al olvido y la injusticia que implica reparar sus errores de desgobierno, Cuitláhuac pensó que su ineficacia podría ocultarse y que luciría más los halagos del presidente para poder colocarse en una posición dentro del actual gabinete de la presidenta electa, pero su destino es el basurero de la historia.
Los elogios al gobernador de Veracruz resultan no son sólo inexplicables sino gratuitos, por ejemplo en la conferencia matutina del jueves 8 de febrero, desde Palacio Nacional, López Obrador fue cuestionado sobre hechos violentos en Sonora, a lo que respondió que Alfonso Durazo es un “buen gobernador”, al igual que Cuitláhuac García, de quien nadie estaba hablando en ese momento.
Por si fuera poco, la injustificada alusión abundó sobre el tema en respuesta de los medios: “En Veracruz se había padecido de muchos gobernadores mediocres y ladrones, para que me obligas a decir eso, ladrones, mucho pueblo el de Veracruz para tan pocos gobernantes. Podrán decir lo que quieran de Cuitláhuac, pero no es rata, no es corrupto”.
Lo mismo sucedió el 10 de abril de 2023, luego de que la Comisión Nacional de Derechos Humanos lo señalara como omiso en algunos casos y añadió. “Mis paisanos veracruzanos tienen la dicha de contar con un buen gobernador”, a pesar de que Cuitláhuac había sido llamado a comparecer a una comisión del Senado para aclarar el permanente rechazo a las recomendaciones de esa instancia sobre diferentes casos de abusos de autoridad en la entidad, tales como desaparición forzada, tener presos políticos, desapariciones forzadas entre otras muchas arbitrariedades que han hecho del régimen de García Jiménez uno de los más represivos de la historia.
Podría decirse que es de las pocas entidades, o la única, que tiene presos políticos, el caso del exsecretario de gobierno y exlíder estatal del PRD, Rogelio Franco Castán, ha rebasado no sólo los límites de Veracruz sino las fronteras, y a pesar de todo los mimos del presidente continúan.
Pareciera que el hombre mejor informado del país desconoce el permanente rechazo del mandatario estatal a las recomendaciones de las comisiones de derechos humanos, tanto estatales como federales. Tanto la exaltación de las virtudes inexistentes como la insistencia de sus bondades imaginadas de parte del presidente son de pena ajena, porque todos sabemos que la mediocridad de Cuitláhuac ha rebasado los límites y cualquiera pensaría que es honesto porque ni siquiera tiene capacidad de robar y no porque no quiera hacerlo.
El presidente inició el sexenio hablando muy bien de Cuitláhuac y parece que sólo por mantener la congruencia y no manchar su imagen con la del gobernador, sigue en esa misma línea, pero siempre hay límites; de hecho, el martes 16 de julio el presidente habló de la represión ocurrida en el desalojo de Totalco, municipio de Perote, donde murieron los hermanos Jorge y Alberto Cortina. No pudo dejar de responsabilizar al gobernador y a la Fuerza Civil, ahora desarticulada, de los hechos.
“Estamos informados desde que se dieron los hechos, muy lamentables, no debió actuar así la policía del Estado. Nosotros hemos llevado a la práctica una política de no represión, no se debe de utilizar la fuerza y en este caso lamentablemente hubo represión y fallecieron dos campesinos”, declaró el presidente.
García Jiménez no quiere decir quién dio la orden de disparar contra la población civil de Totalco, hasta ahora se sabe que en la cadena de mando los únicos que podían dar esta orden son: El Gobernador, Cuitláhuac García Jiménez; el titular de la Secretaría de Gobierno, el tabasqueño Carlos Juárez Gil o el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Cuauhtémoc Zúñiga Bonilla.
Este caso, dicen algunos, le costó al ingeniero no formar parte del gabinete de Claudia Sheinbaum, quien prácticamente dio a conocer ya todo su gabinete. Aunque la esperanza del irresponsable gobernador sigue viva.
Por cierto, el Primer Mandatario cuando no exagera sus cuestionamientos, se excede en alabanzas de los personajes que para él son dignos de elogio, y ahora no deja fuera de su discurso ningún adjetivo positivo, optimista y muchas veces reiterativo sobre las virtudes de la presidenta electa, quien puede tener esos méritos y más, pero no hace falta que los repita con tanta insistencia y con vehemencia inusual.
Como Cuitláhuac todavía se cree rey mexica anunció que, porque así se le pega la gana, dará su sexto Informe de gobierno en el municipio de Veracruz el 18 de agosto.
La presidenta electa puede tener los méritos que quiera, pero la población está en espera de que se muestren en la práctica. Nadie duda de ellos, pero tampoco puede exagerar cada mañana y hablar del tema cuando en realidad nadie hace referencia de ella.
PEGA Y CORRE. – Por ley no puede haber cambios en los partidos políticos mientras el año electoral no haya terminado y tanto el PRI como el PAN ya convocaron a la renovación de sus liderazgos nacionales, con riesgo de que el INE se los tumbe. El año electoral termina con la entrega de constancia de mayoría a la presidenta electa.
Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes.
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