Cierra la administración del presidente Enrique Peña Nieto y entre los órganos autónomos —el contrapeso del Poder Ejecutivo— hay demasiados espacios disponibles: acéfala quedará la presidencia de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, por la renuncia de Juan Carlos Zepeda. En el Instituto Nacional de Geografía y Estadística, desde hace un año, está vacío uno de … Continued
Cierra la administración del presidente Enrique Peña Nieto y entre los órganos autónomos —el contrapeso del Poder Ejecutivo— hay demasiados espacios disponibles: acéfala quedará la presidencia de la Comisión Nacional de Hidrocarburos, por la renuncia de Juan Carlos Zepeda. En el Instituto Nacional de Geografía y Estadística, desde hace un año, está vacío uno de los cinco asientos de la Junta de Gobierno tras de la renuncia del actuario Rolando Ocampo Alcántar. Y justo dentro de 33 días habrá otra vacante, cuando se extinga el periodo para el que el abogado Mario Palma Rojo fue ratificado, por el Senado de la República.
El Inegi y la CNH están en segundo plano. Para el Banco de México, el presidente electo perfiló a Jonathan Heath y Gerardo Esquivel como subgobernadores. Sus nombramientos —se entiende— serán procesados con agilidad por la mayoría morenista. Antes de que concluya el año.
El Inegi podría quedarse con cinco integrantes… ¿o menos? Julio Santaella no había contactado al próximo secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, para establecer las prioridades presupuestales del 2019, que incluirían el nuevo Censo Económico, el Censo Agropecuario y las provisiones para la planeación y preparación del Censo de Población y Vivienda nacional, en el 2020.
Antes de resolver sobre este particular, los senadores tendrán que proceder al nombramiento de la vacante abierta en el órgano garante del acceso a la información, por el reciente deceso de Carlos Alberto Bonnin Erales. La legislación vigente obliga a la Cámara alta a convocar a la elección del nuevo comisionado del INAI en un plazo no mayor a 60 días.
Para entonces, tendrán que estar aclaradas a plenitud las circunstancias del percance sufrido por el comisionado Bonnin Erales la mañana del pasado lunes 26.
El comisionado presidente, Francisco Javier Acuña, insistía en que era “incontrovertible” que su deceso se produjera tras del infarto que golpeó a su corazón en el Hospital Ángeles y lamentaba las “repugnantes filtraciones” que lo obligaron a admitir que había caído desde el roof garden de la sede central del INAI.
¿Cayó? ¿Se desplomó… o se tiró? Asqueado por los reporteros y los columnistas que “morbosearon” (sic) en la víspera sobre el asunto, Acuña sostuvo que está obligado a proteger los datos personales y que —por lo mismo— reclamó airadamente al procurador de justicia capitalino, Edmundo Garrido Osorio, por la filtración de fotografías y videos del percance. En el camino, soltó datos que alimentan las suspicacias: personal del servicio médico y guardias de la empresa privada de seguridad asistieron al comisionado Bonnin Erales, quien entró en shock y fue reanimado por los paramédicos; a la sede del INAI llegaron un hermano y la esposa del accidentado, quienes decidieron trasladarlo al Hospital Ángeles del Pedregal en una ambulancia que tardó 45 minutos en arribar al lugar.
Las imágenes divulgadas sobre el incidente, tuvo que reconocer el comisionado presidente, no provenían de las periciales. ¿Filtraciones o fuego amigo en el INAI? La inmolación, una de las líneas de investigación.
Si las autoridades judiciales confirmaran tal hipótesis, se abrirá una nueva polémica. Ésta, sobre los criterios que guían el proceso de selección, que dejó la salud de los candidatos en segundo plano. Bonnin Erales —quien fue electo hace siete meses— nunca ocultó su tabaquismo, pero anteriormente había tenido un evento cardiaco.
Abogado formado en la Universidad Panamericana, con una maestría en derecho internacional del Tec de Monterrey, acababa de cumplir 39 años. En los últimos 15 años había desarrollado una intensa carrera en el servicio público, de la mano de la maestra Arely Gómez González, a quien conoció en la SCJN.
Hace cinco años, Bonnin Erales era director general jurídico adjunto de la Secretaría de Salud, pero su jefa lo convocó al Senado de la República, para que se integrara como titular de la Unidad de Transparencia. En marzo del 2015, Gómez González lo llamó a la PGR y lo nombró su secretario particular. Apenas estuvo allí cinco semanas y tuvo que separarse de ese cargo por recomendación médica.
El joven abogado regresó a la Cámara alta, pero mantuvo su vínculo con la secretaria de la Función Pública saliente. En el INAI recuerdan esas historias y han reaccionado con azoro ante la hipótesis del suicidio, pero también a la información que inicialmente ofreció Acuña.
Por lo pronto, el pleno del INAI sesionará con seis comisionados en tanto el Senado de la República elige al sustituto de Bonnin. “Tendría que ser mujer”, refieren en ese órgano parlamentario, “para honrar el principio de paridad de género”.
En el proceso anterior, hubo un cuarteto de candidatas con altas calificaciones: la expresidenta del Instituto de Acceso a la Información en Zacatecas, Norma Julieta del Río Venegas; la presidenta del Instituto de Transparencia de Jalisco, Cynthia Patricia Cantero —hija del magistrado Salvador Cantero, quien buscó ser auditora superior del Congreso tapatío; la titular del órgano garante en Veracruz, Yolli García Álvarez, y Lourdes López Salas, de Durango.
EFECTOS SECUNDARIOS
ESTRENO. El glifo de una flor zapoteca de cuatro pétalos, coronada con una “O”, letra griega similar a la “T” será el pictograma que identifique a la cuarta transformación. “Indígena y occidental a la vez, esta imagen de la 4T es un símbolo del mestizaje de nuestra cultura y de la primavera que se aproxima para nuestra historia nacional”, explicaron en la casa de transición. ¡Órale!
OBSTRUCCIONES. Sin amenaza de quiebra y alejado de cualquier proyecto inmobiliario —sobre todo por la cancelación de los permisos, por parte de las autoridades locales—, el Junior Club de la colonia Hipódromo Condesa ya tendría que haber reabierto sus puertas. Los administradores del centro deportivo y los trabajadores han alcanzado un principio de acuerdo. Como terceros interesados, los vecinos de la demarcación, que han contactado a los huelguistas su asesoría para convencerlos sobre su causa. Hasta les ofreció un media training.