Paradojas de la austeridad republicana
Con el arranque del mes en curso, los clientes del Instituto Fonacot que hayan recibido un préstamo en efectivo —los créditos para imprevistos, una transferencia bancaria es la modalidad más socorrida— son acreedores a una tasa de interés 20% menor, gracias a la política de austeridad de la cuarta transformación.
De acuerdo con la información proporcionada por el director general del organismo, Alberto Ortiz Bolaños, a los integrantes del Consejo Directivo, podrán ser beneficiados hasta 1 millón de trabajadores de este nuevo programa, producto de las políticas de ahorro y la eficacia de la gestión que, en el primer semestre del año, generaron un resultado neto de 1,403 millones de pesos, 130% mayor que el obtenido en el mismo periodo del 2018.
Paradojas de la austeridad republicana: la directiva del Infonacot dio cuenta —hace 10 días— de la reducción de las tasas de interés y adelantó que se encuentra en proceso de constituir un Fondo de Protección del Desempleo, con aportaciones de los trabajadores, que resarciría al instituto de los efectos del desempleo en el pago de los préstamos.
Fue su primera notificación de “evento relevante” a la Bolsa Mexicana de Valores en lo que va del año. El Infonavit reveló que el Fondo de Desempleo “se encuentra en análisis de la Secretaría de Hacienda” y sólo se implementaría en caso de que se contara con el criterio favorable de la dependencia. Siendo el caso, las aseguradoras que cubren actualmente los créditos quedarían eximidas de esa responsabilidad.
“A cuotas idénticas, los riesgos que asumiría el fondo serían inferiores a los del Seguro, además de que se incurriría en menores gastos, lo cual daría mayor seguridad a la protección”, explicaron.
Pero el Fondo Infonacot —como se le denominó— ya se cobra a los trabajadores, de acuerdo con copias de los contratos firmados por solicitantes del crédito en efectivo. La modificación de esos documentos debería contar con la autorización del Comité Directivo, cuyo nuevo secretario acaba de cumplir un mes en funciones.
Con indicadores de solvencia en niveles de fortaleza, una satisfactoria calidad de activos productivos, adecuados niveles de rentabilidad, diversificación en herramientas de fondeo y amplio monto disponible —de acuerdo con las calificadoras—, actualmente, origina cartera en los 32 estados de la República Mexicana, a través de 329,888 centros de trabajo.
La reforma laboral del 2014 trajo un boom de nuevos afiliados, pues establece la obligatoriedad de los centros de trabajo de vincularse al instituto. Con tal cartera de clientes y el apalancamiento del gobierno federal, las calificadoras han refrendado su opinión sobre el instituto en los últimos años.
Pero la penetración del mercado existente, una estrategia conservadora de la directiva saliente por el cambio de gobierno y —sobre todo— la desaceleración económica en el país comienzan a modificar los escenarios positivos.
Y es que el Fondo Infonacot, que buscaría bajar el Índice de morosidad, quedaría a cargo directamente de los acreditados. ¿La baja de intereses también se traduce en un descenso en la suma asegurada?.
Legalmente, el Instituto Fonacot es un organismo descentralizado de fomento, bajo regulación por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. ¿Y también por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas, al operar activamente un seguro de crédito según lo estipulado en los artículos 200 y 201 de la ley del ramo?
El contrato o cláusula incorporada al mismo, celebrada por una institución de seguros sin registro correspondiente, es anulable y la acción sólo podrá ser ejercida por el contratante, asegurado o beneficiario o por sus causahabientes contra la institución de seguros y nunca por ésta contra aquellos.
La reducción de primas fue informada al Consejo Directivo en la sexagésima séptima asamblea ordinaria, del pasado 26 de julio (acuerdo CD 60-260719), pero nada más. Esa instancia —el máximo órgano de gobierno del Instituto Fonacot— no ha autorizado la constitución del Fondo y tampoco sus instancias fiscalizadoras, entre las que están la Función Pública, la CNBV, la ASF o la Condusef.
Para gestionar el riesgo de crédito, el Instituto Fonacot está obligado a crear reservas —o provisiones— para cubrir la pérdida esperada de los créditos que componen la cartera, las cuales disminuyeron al contar con el seguro de crédito por parte de las aseguradoras. Para cubrir directamente su cartera contra el posible no pago de los créditos otorgados, deberá modificar su objeto social, lo que implica reformar su propia ley.
En una reunión, a mediados de la semana pasada, quedó explícito que las áreas de administración y finanzas no logran encontrar la solución para reportar el Fondo, pues cada pago de los trabajadores debe ser registrado como ingreso en la contabilidad del instituto.
EFECTOS SECUNDARIOS
IMPERTURBABLE. A mediados de la semana pasada, se dejó ver en las escalinatas del Pepsi Center. Con barba de varios días, jeans y chaleco impermeable, el exconsejero jurídico de Los Pinos Humberto Castillejos estuvo más de media hora afuera del centro de espectáculos. Y luego, en la zona VIP, celebró a los standuperos que acudieron al evento en beneficio de Reinserta, la ONG que dirige Saskia Niño de Rivera. Esa tranquilidad se perderá, a partir de las revelaciones de Santiago Nieto Castillo…
UNIFICADORES. La metamorfosis del PRD avanza inexorable. Futuro 21 sumó personalidades de todos los espectros políticos —el excandidato presidencial Gabriel Quadri; la excandidata a jefa de Gobierno Purificación Carpinteyro, y el exsecretario de Salud José Narro están entre los más sobresalientes—, quienes aceptaron la invitación de Jesús Ortega para construir una alternativa ante lo que llaman “regresión autoritaria” y que no sería otra cosa que la cuarta transformación. Con ese mismo espíritu unitario, el expresidente nacional del sol azteca y líder de Nueva Izquierda, presentará en dos semanas Reencuentro, la izquierda y el liberalismo político, un libro de Miguel Ángel Porrúa.