Es Alcalde Luján, y no López Hernández, quien debe intervenir en el conflicto pues los petroleros decidieron tomar las calles para exigir el cumplimiento del contrato colectivo de trabajo
Quedan cuatro semanas para cumplir la instrucción presidencial y celajes distintos cercan a Dos Bocas, el segundo de los megaproyectos que entregará Andrés Manuel López Obrador. Dada su naturaleza —estrictamente administrativo uno, de índole laboral, el otro—, el Ejecutivo federal dejará por ahora al margen de estas conflictivas a su operador estrella, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández.
La inauguración de la refinería Olmeca cumple con el cronograma marcado por la secretaria de Energía, Rocío Nahle, pero los problemas para cubrir las deudas con proveedores y contratistas son inevitables y ya requieren de la intervención del secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
Dos Bocas podría sufrir el boicot de los trabajadores afiliados al Sindicato Petrolero, quienes recientemente dieron de su capacidad de movilización y presión mediática. Antes y ahora han topado con pared. En el piso 43 de la Torre de Petróleos Mexicanos no están dispuestos a tolerar chantajes, sin importar su origen.
Es Alcalde Luján, y no López Hernández, quien debe intervenir en el conflicto pues los petroleros decidieron tomar las calles para exigir el cumplimiento del contrato colectivo de trabajo. Antes de la renovación del contrato y de la toma de nota a la nueva directiva sindical, hubo un emplazamiento a huelga. La renovación del contrato ocurrió en septiembre del año pasado.
Sin dudas, el respaldo presidencial a Romero Oropeza, pero nadie quiere retrasos en el cumplimiento de la palabra presidencial. Y por eso, la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde recibió la encomienda de sentar a la mesa a los líderes del SNTPRM y dialogar, antes de cualquier otra medida de presión.
Antes, la titular de la STPS tuvo que reconocer el cúmulo de peticiones de audiencia tramitadas por los líderes petroleros —más de 60— ante el director general de Pemex. Todas y cada fueron recibidas, pero quedaron sin respuesta.
Alcalde Luján ya logró sentar a los petróleos en la mesa y abrir un diálogo. En su jurisdicción ha quedado uno de los conflictos laborales más álgidos de lo que va del sexenio y que —dada la beligerancia de las partes— puede escalar a estadios más complicados.
En el otro frente: ante las expectativas generadas por el acuerdo de refinanciación de deuda propuesto por Petróleos Mexicanos para intercambiar facturas pendientes, por bonos pagaderos en el 2029, de Palacio Nacional salió la sugerencia de que el director de la empresa, acuda a la conferencia matutina. Sin problemas financieros o de liquidez en el corto plazo y con una cotización de la mezcla mexicana de crudo y el alza en exportaciones, la directiva de Pemex pudo activar esta propuesta a sus contratistas y proveedores. Específicamente este acuerdo al cual podrán adherirse los que cuenten con facturas pendientes por montos superiores cinco millones de dólares.
Efectos secundarios
¿MUDANZAS? Después de la forzada salida de El Heraldo de la televisión abierta, el equipo del empresario Ángel Mieres volverá a la programación… ahora en el canal 8. La Octava ya había dejado de emitir producciones audiovisuales propias, debido a los problemas de liquidez de Juan Aguirre Abdó, quien se vio forzado a rentar esa frecuencia.