Estas son las principales noticias de América Latina y el mundo de este lunes 8 de diciembre de 2025, presentadas por Radar Latam 360
Radar Latam 360 presenta las cinco principales noticias de América Latina y las tres claves internacionales para estar bien informado este lunes 8 de diciembre de 2025.
Sigue al politólogo Daniel Zovatto (@Zovatto55) para más análisis estratégico sobre América Latina y el mundo en tiempo real.
América Latina:
1. Honduras no logra salir de su laberinto electoral: fallas y nuevas demoras en el escrutinio, denuncias de fraude y aumenta el peligro de que el país ingrese a una crisis mayúscula
Las persistentes fallas en el escrutinio de las elecciones generales del 30 de noviembre han expuesto nuevamente la fragilidad institucional del sistema electoral hondureño, luego de que el conteo quedara paralizado desde el viernes por “problemas técnicos ajenos al pleno”, según la presidenta del CNE.
Con el 88.6 % de las actas procesadas, el candidato nacionalista Nasry Asfura mantenía una ligerísima ventaja (40.19 %) sobre Salvador Nasralla (39.49 %), mientras Rixi Moncada, tercera con 19.30 %, insistía en que la elección no debía darse por concluida.
Las demoras y la falta de claridad detonaron acusaciones de errores graves, denuncias de fraude y llamados de la OEA para acelerar y transparentar el proceso, mientras expertos nacionales advertían la urgencia de reformas profundas al CNE y al TJE.
La MOE/OEA consideró «imperativo» que las autoridades electorales garanticen eficiencia y claridad en las etapas pendientes –incluido el escrutinio especial y las impugnaciones– para evitar nuevos retrasos.
En este clima de incertidumbre, Rixi Moncada —candidata del oficialista Partido LIBRE— anunció que no reconocerá los resultados, denunciando un supuesto “golpe electoral” atribuyendo la ruptura del proceso a “injerencia externa” ligada al respaldo que Donald Trump dio a Asfura (candidato del Partido Nacional), asegurando además que el sistema TREP presenta “fallas graves” y “más del 95 % de actas son inconsistentes”. La dirigente oficialista convocó a una movilización nacional para el 13 de diciembre y ordenó a su partido abstenerse de participar en cualquier transición de gobierno, profundizando una crisis política que cuestiona la transparencia, la legitimidad y la capacidad del sistema electoral hondureño para garantizar resultados confiables.
Por su parte, el candidato presidencial del Partido Liberal, Salvador Nasralla, afirmó que “todo sigue igual desde la madrugada del jueves 4 de diciembre en el cómputo del CNE, porque no se ingresó las actas de Cortés, Yoro, Atlántida y Colón”. Acto seguido afirmó que el ganó las elecciones del 30 de noviembre y que esta vez no permitirá que se las roben porque tiene el 100 por ciento de las actas que los respaldan. “Esta vez no pasará como en el 2013 y 2017 cuando me robaron las elecciones porque no tenía quien me defendiera en las mesas, pero ahora con el Partido Liberal es diferente, porque el PL tiene presencia en toda Honduras y por eso tengo las actas que respaldan mi triunfo y por tanto no permitiré que me roben las elecciones”. Nasralla afirmó que: “En más de cinco mil actas ya comprobamos que existen inconsistencias y errores graves que están alterando la voluntad del pueblo expresada en las urnas y por eso estamos solicitando una revisión minuciosa, incluida y de ser necesario la verificación voto por voto”. Por ello, pidió tranquilidad al pueblo hondureño porque según el reglamento del CNE, “tenemos hasta el 29 de diciembre para la revisión, porque nuestro departamento de cómputo con el 100% de las actas físicas en mano nos ha demostrado que ganamos esta elección”.
Resumiendo: Durante el pasado fin de semana, el árbitro ha sido incapaz de asignar un solo voto adicional a los dos principales candidatos en contienda.
El órgano de Electoral ha vuelto a pedir paciencia a los candidatos y ciudadanos, ha prometido que en breve se reactivará la actualización de los resultados, y recordó que la legislación les otorga 30 días para dar a conocer al ganador de los comicios.
“Dejen que continuemos nuestro trabajo”, reclamó la presidenta del CNE, Ana Paola Hall.
Empero, para añadir más confusión y dudas sobre la capacidad de la empresa contratista (ASD), ayer domingo, el miembro de LIBRE en el CNE, Marlon Ochoa, denunció que alguien modificó “el código fuente del sistema de transmisión de datos y de escrutinio general”. “El software de la transmisión fue modificado sin utilizar las tres llaves, es decir, que alguien tuvo acceso al sistema ya sellado, lo abrió, introdujo cambios y volvió a cerrarlo al margen de las garantías previstas en la Ley Electoral de Honduras”, afirmó el consejero del oficialismo.
En síntesis: A ocho días de los comicios, el Consejo Nacional Electoral (CNE) todavía no ha concluido el escrutinio y no parece estar cerca de hacerlo.
2. Argentina: Milei en el ecuador de su mandato: del recorte del Estado argentino con motosierra al rescate de Trump
A dos años de asumir la presidencia de Argentina, Javier Milei llega al “ecuador” de su mandato con una mezcla de logros, convulsiones políticas y un inesperado salvavidas externo. Durante este período, aplicó una agenda de austeridad radical: recortó drásticamente la obra pública, los subsidios, redujo pensiones, eliminó empleos estatales, disminuyó el financiamiento a universidades, hospitales y ciencia, y cerró organismos públicos, con la promesa de “destruir al Estado desde dentro”.  Estas medidas beneficiaron en cambio a sectores exportadores, grandes empresas mineras, energéticas y agroexportadoras, con la intención de atraer capitales y dólares externos. 
El ajuste provocó una ola de protestas —especialmente por los recortes a la universidad pública y la salud— y generó fuertes críticas por su impacto social.  Además, su gobierno quedó salpicado por escándalos de corrupción: una presunta estafa relacionada con la criptomoneda promovida por el propio presidente, sobornos en organismos públicos, y denuncias sobre irregularidades vinculadas a familiares próximos. 
Económicamente, aunque estimuló una reducción de la inflación desde niveles dramáticos —lo que le dio argumentos ante parte de su electorado—, la economía quedó dividida en dos velocidades: una parte beneficiada por los cambios estructurales y otra sumida en la fragilidad, con un consumo retraído y una caída del poder adquisitivo que endureció la vida diaria. 
El giro más inesperado —y decisivo para su supervivencia política— llegó desde el exterior: Donald Trump y el gobierno de Estados Unidos intervinieron para estabilizar el peso argentino vendiendo dólares al mercado local y realizando un intercambio de monedas valuado en 20.000 millones de dólares, lo que ayudó a frenar la crisis cambiaria y le permitió a Milei recomponer su base de apoyo.  Gracias a esa estabilización y un relativo alivio inflacionario, su partido logró una inesperada victoria en las elecciones legislativas de octubre de 2025 —cerca del 41 % de los votos—, lo que le devuelve aire político y le allana el camino hacia una segunda mitad del mandato con un Congreso más favorable. 
Con ese combo de recortes, ajustes, crisis social, rescate externo y legitimación electoral, Milei afronta lo que resta de su presidencia con un poder renovado, pero sobre un tablero frágil y lleno de tensiones: la economía sigue dividida, los reclamos sociales persisten, y los escándalos de corrupción siguen dejando una sombra sobre su administración.
3. Panamá se ofreció a recibir a miembros de la dictadura de Nicolás Maduro para facilitar una transición en Venezuela
El gobierno del presidente José Raúl Mulino, a través del vicecanciller Carlos Hoyos, manifestó que el país está dispuesto a servir como mediador en un eventual proceso de transición en Venezuela, y que podría acoger de forma “temporal” a personas vinculadas al régimen Nicolás Maduro —es decir, miembros de lo que la nota califica como “dictadura”— si fuera necesario para facilitar negociaciones entre Caracas y Estados Unidos. La propuesta, evaluada por el presidente panameño Mulino y sus autoridades, busca contribuir a una salida dialogada y evitar una escalada del conflicto en la región, en un contexto de fuerte tensión diplomática, militar y aérea en el Caribe, tras las fraudulentas elecciones venezolanas de 2024 y el incremento del despliegue militar de EE. UU. Cerca del Canal de Panamá, cuya operación podría verse afectada por un eventual conflicto, las autoridades panameñas expresaron su preocupación ante cualquier interrupción, destacando que su oferta de recibir a miembros del régimen venezolano obedece a una voluntad de neutralidad, estabilidad regional y ayuda a una negociación pacífica.
4. Brasil: Un hijo de Bolsonaro —Flavio— entra en la carrera presidencial en medio de tensiones en el clan y el abandono de Trump
Flávio Bolsonaro, hijo mayor del expresidente Jair Bolsonaro —actualmente cumpliendo una condena de 27 años por conspirar contra la democracia—, anunció su candidatura para las elecciones presidenciales de Brasil en 2026 con el supuesto encargo de su padre.
Su postulación busca mantener la influencia del clan Bolsonaro en la política del país, en un momento en que su figura está debilitada por la cárcel, las divisiones internas familiares y el rechazo de sectores clave de la derecha.
Además, la decisión ha reavivado tensiones dentro de la familia: su madrastra, Michelle Bolsonaro —quien había ganado protagonismo político recientemente— también aspira a un rol relevante y representa otro bloque de poder. 
Políticamente, Flávio no cuenta con el respaldo mayoritario de las élites financieras, los partidos tradicionales de la derecha o las iglesias evangélicas, que consideran que no tiene las mejores cartas contra el favorito Luiz Inácio Lula da Silva, quien lidera las encuestas para la reelección.
En ese contexto, la campaña se perfila como una prueba para ver hasta dónde puede llegar la “marca Bolsonaro” sin su fundador como figura central —y mientras su padre permanece tras las rejas bajo estricta vigilancia. 
5. Venezuela: Así se sostiene Maduro en el tablero internacional
Durante la última década, el dictador Nicolás Maduro ha transformado al Estado venezolano en una maquinaria político-militar-policial diseñada para resistir presiones externas —sobre todo de EEUU—, logrando mantener el control interno a pesar de la profunda crisis social y económica. Su estrategia parte de una unión cívico-militar-policial que hoy funciona como pilar del régimen, capaz de enfrentar amenazas de intervención, sanciones y hostilidad internacional.
En el plano internacional, el chavismo continúa promoviendo la idea de un “mundo multipolar”, consolida relaciones con potencias contrarias a Estados Unidos (como China, Rusia, Irán, Turquía o Bielorrusia) y se apoya en aliados regionales, manteniendo una diplomacia que privilegia regímenes autoritarios o gobiernos de izquierda afines. Tras las elecciones de 2024, en las que Maduro cometió un fraude mayúsculo, varios antiguos aliados regionales mostraron su rechazo; esto ha reducido algo el respaldo internacional, aunque el régimen profundizó su dependencia militar y tecnológica de sus padrinos internacionales.
A pesar de la presión global, ese delicado equilibrio —un Estado interno engrasado para el control y una red internacional de alianzas no democráticas— sigue siendo la base sobre la cual el chavismo se sostiene frente al mundo. La gran pregunta es si esta estrategia le servirá para resistir la creciente presión que actualmente ejerce Trump sobre el chavismo.
Claves internacionales
1. Estados Unidos: La posible llegada de un pupilo de Trump a la presidencia de la Reserva Federal pone en guardia al mercado. Otros analistas en cambio se mantienen optimistas de cara al 2026
El posible nombramiento por parte del presidente Donald Trump del economista Kevin Hassett —actual asesor económico de la Casa Blanca— como favorito para suceder en mayo de 2026 al actual presidente de Reserva Federal (Fed) ha generado inquietud entre los inversores.
Debido a la lealtad manifiesta de Hasset con Trump y su supuesta disposición a recortar las tasas de interés incluso con inflación por encima del 2 %, muchos gestores temen que su presidencia provoque una pérdida de confianza en los activos estadounidenses, una caída del dólar y ventas masivas de bonos. Además, el posible nombramiento coincide con un contexto de alto endeudamiento, valoraciones bursátiles elevadas —especialmente en sectores vinculados a la inteligencia artificial— y signos de deterioro en el empleo, lo que incrementa la sensación de vulnerabilidad del mercado. Por último, analistas advierten que lo realmente decisivo no será tanto quién presida la Fed, sino si la administración logra renovar —y controlar— otros puestos clave en la junta de gobernadores, lo que podría erosionar la independencia del banco central y alterar el rumbo de la política monetaria. En sentido contrario, varios bancos de EEUU e internacionales prevén otro año excepcional (2026) de ganancias que van desde el 6% hasta el 16% para el SP500 como consecuencia de posibles recorte de tasa de interés, menos regulaciones, baja de impuestos e inversión masiva en IA y centros de datos, todo ello acompañado de buenas tasas de rendimiento y utilidades de las empresas. Amanecerá y veremos…
2. Siria celebra un año sin la dictadura de El Asad entre la ilusión y la inquietud
A un año del fulminante derrocamiento del régimen de Bashar al Asad tras una ofensiva rebelde de apenas 11 días, el país vive un momento de contrastes: por un lado, millones celebran la liberación, la recuperación de libertades como la de expresión y la reintegración internacional del país bajo el nuevo gobierno encabezado por Ahmed al Shara. Sin embargo, la alegría convive con graves heridas: una economía arrasada, con hasta un 90 % de la población bajo el umbral de la pobreza; desempleo, inflación, destrucción de servicios básicos, viviendas en ruinas y dificultades extremas para quienes siguen desplazados en campamentos como Al Rahma.
Aunque más de tres millones de sirios han comenzado a volver a sus hogares, muchos lo han hecho hacia casas destruidas o han tenido que reubicarse con familiares, y la reconstrucción de infraestructuras esenciales aparece como un reto titánico. A esto se suman la persistencia de fragmentaciones territoriales —con áreas bajo control kurdo o de otros grupos—, la inseguridad, la violencia recurrente especialmente contra minorías religiosas, y el temor de estos sectores de no encontrar un lugar seguro en la nueva Siria.
En definitiva: un año después de la caída de Asad, Siria vive una mezcla de ilusión por la libertad recuperada y de inquietud —e incertidumbre— por un futuro apenas esbozado, donde la reconstrucción del país y la reconciliación nacional serán clave para que la esperanza no se disipe entre los escombros.
3. Alemania: Merz, acechado por la extrema derecha y la frágil economía, busca su espacio para liderar Alemania y Europa
El canciller alemán, Friedrich Merz, afronta un inicio de mandato estremecido por divisiones internas en su partido, una coalición delicada con los socialdemócratas, y una economía estancada que arrastra una profunda crisis industrial. Su reciente victoria en el Parlamento con la aprobación de un polémico plan de pensiones le dio algo de oxígeno político, pero tanto esa ley como el voto para instituir un servicio militar voluntario evidenciaron las fracturas dentro de su bloque.
Con esos desencuentros aún frescos, Merz busca proyectarse más allá del ámbito doméstico: ahora pretende convertirse en un referente europeo, aprovechando la debilidad del liderazgo de otros países, la tensión con potencias como Rusia, China y Estados Unidos, y el ánimo de redefinir el rol de Alemania en la UE.
No obstante, su falta de experiencia ejecutiva, la continua desconfianza ciudadana y el creciente ascenso del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) —que podría imponerse en varios estados regionales en 2026— complican seriamente sus aspiraciones de consolidar un liderazgo firme en Alemania y Europa.
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