El doctor Conrad Murray narró cómo fue el último día de Michael Jackson, acusando a los paramédicos de la muerte del cantante
Conrad Murray, el doctor de Michael Jackson acusado de haber provocado su muerte, hizo revelaciones que vienen incluidas en su libro “This is it”, sobre la muerte del cantante y los problemas que acarreaba.
Recordemos que el Rey del Pop murió en 2009 por una combinación de insomnio, estrés y drogas, antes de iniciar una serie de conciertos. Murray fue acusado de haberle inyectado propofol, el cual ya había sido usado por varios años.
Lo mataron los paramédicos y el demerol
En una entrevista, el médico afirmó que no fue el propofol que le inyectó lo que lo mató, sino su adicción al Demerol, la cual fue ocultada hacia el doctor, asegura.
Acusó a los paramédicos de ser los principales culpables de la muerte de Michael Jackson, al actuar como “bufones” desde el principio, pues el cantante había llegado vivo al hospital.
“No había dificultad en entubar a Michael. Pero fuera de esa tarea, nada más se hizo de manera exitosa para salvar a ese hombre por los paramédicos, específicamente durante los siguientes 25 o 30 minutos”, acusó. “Ellos querían declarar su muerte en el lugar, basándose en el protocolo de tiempo de Los Ángeles”.
Problemas familiares de Jackson
Conrad Murray aseguró que Michael Jackson tenía grandes problemas a cuestas, los cuales le confesó por ser considerado su amigo.
“Éramos amigos por lo que me contó varias adversidades. Llevaba una carga muy, pero muy pesada de miseria”, confesó, la cual venía de su propia familia.
Uno de esos problemas fue el que sufrió cuando su padre le inyectó un químico para que no viviera la pubertad y los cambios físicos que esta conlleva.
“Se sintió químicamente castrado. Michael se sintió como el banco de la familia — el cajero, y estaba cansado de eso”.
Estos no fueron los únicos abusos familiares, puesto que se asegura confesó ser víctima de sodomía y golpes.
“Dr. Conrad, soy una víctima de sodomía”, confesó. “Todo mundo habla de cómo fui golpeado por mi padre, cómo me ponía apodos y me decía que era feo”.
Por este motivo, quiso cambiar su apariencia, para “olvidar mi pasado, pero no me hizo olvidar nada”.
El Rey del Pop no era perfecto
Finalmente, Conrad Murray expresó su cariño hacia el cantante, recordando a todos que nadie es perfecto, ni siquiera el Rey del Pop.
“Quiero a Michael. No era perfecto. No soy perfecto. Nadie de nosotros lo es”, dijo.
Con información de Huffington Post y Local 10 News
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