El creciente desplazamiento de tropas y equipo militar pesado en las calles, que algunos ciudadanos comienzan a ver con “normalidad”
El creciente desplazamiento de tropas y equipo militar pesado en las calles, que algunos ciudadanos comienzan a ver con “normalidad”.
El impresionante descenso a rappel de docenas de agentes migratorios, en techos de edificios de departamentos de South Side, en Chicago, equipados para la guerra, destruyendo puertas y ventanas, para capturar y separar a aterrorizadas familias de inmigrantes, entre gritos y el llanto de niños semi desnudos, son inobjetable evidencia del desmantelamiento de la democracia, .
Amparados en la destructiva fuerza de la mentira, sin argumentos válidos, violando la Constitución y soberanía de los estados; sin aprobación de los gobernadores, ni establecer objetivos claros o fecha de permanencia de tropas, brutales ejecutores convierten ciudades tranquilas en zonas de guerra, con la “justificación” de estadísticas criminales magnificadas, distorsionando el papel de inmigrantes, que contribuyen e impulsan a la economía y presentándolos como “fuerza invasora, que lanza ataques terroristas contra agentes del gobierno federal y destruye comunidades.”
Trump y republicanos descargan su fobia anti inmigrante, con todos los elementos a su alcance, como la paralización del gobierno, por falta de presupuesto,” con la mentira de que “los demócratas quieren fondos para atención medica de indocumentados,” mientras el presidente amenaza despedir a miles de burócratas, que consideran “no leales.”
En un claro esfuerzo autoritario de mayor control, apoyado por legisladores republicanos y la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Trump avanza con reformas legales y decisiones judiciales que le han dado poder ilimitado, un desproporcionado aumento de presupuesto y autoridad a Inmigración y Aduanas y al Departamento de Defensa, para intensificar deportaciones masivas, terminar la protección del asilo, e impedir que migrantes puedan permanecer en el país, en espera de audiencias, para plantear sus casos.
El avance en la consolidación del gobierno autoritario, contrasta con la crisis económica que se agudiza en el país a causa de tarifas, que tienen al borde de la crisis a productores agrícolas, por la caída de exportaciones a China, México y otros países, lo que obligó al presidente Trump a canalizar este Lunes 16 mil millones de dólares de asistencia, suma inferior a 20 millones de dólares que autorizó de ayuda para Argentina.
Las tarifas incrementan precios de alimentos, combustible y otros productos, mientras aumentan la inflación, desempleo e incertidumbre en inversiones, a pesar de las falsas afirmaciones del presidente Trump.
En un golpe a la tradicional independencia del Departamento de Justicia, Trump lo convirtió en oficina bajo su control, para expandir la remoción expedita de indocumentados, eliminar el debido proceso, deportaciones a prisiones de cualquier país del mundo, y, para ir detrás de numerosos detractores políticos, comenzando con James Comey, exdirector del FBI, que investigó la colusión de su comité de campaña con Rusia y la injerencia de Moscú en la elección presidencial de 2016, para favorecerlo, lo que ahora trata de desmentir.
 
             
Preocupada, la población ve cada vez más operaciones tipo militar, brutales arrestos y detención de personas, aún en lugares sensitivos, como iglesias, escuelas, hospitales, sin orden judicial, pisoteando derechos individuales, negando el debido proceso, confinándoles a centros de detención, lo que aumenta la frustración y podría escalar tensiones y manifestaciones mas agresivas y tal vez violentas, que Trump califique como “insurrección,” para justificar el desplazamiento de mas tropas, cancelar o aplazar las elecciones de medio termino, que le preocupan y hasta suspender garantías por tiempo indefinido.
Igual que la inédita reunión “de emergencia” en Quantico, VA, con más de 800 generales y almirantes estadounidenses, a cargo de contingentes militares de Estados Unidos en todo el mundo, en la que incrédulos, indignados y en silencio, escucharon del presidente Donald Trump y el Secretario de Defensa, increíbles “planes de despliegue militar en ciudades estadounidenses,” que Trump quiere convertir en “campos de entrenamiento,”

De acuerdo a expertos, el presidente Trump genera una crisis constitucional, pisoteando la soberanía de los estados y rechazo de gobernadores al desplazamiento de tropas de la Guardia Nacional, de Texas a California, y de California a Chicago, Il. y eventualmente, a Portland, Oregon, prohibido por la Constitución, salvo en casos excepcionales de “ataque o insurrección generalizada.”
La juez de Distrito de Portland, Karin Immergut, bloqueó el desplazamiento de tropas a Portland, que Trump insiste en realizar y lo criticó severamente por su abierto desafío y su manipulación de la Ley de Insurrección de 1787,” confiando en que la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos, bajo su total control, podría revocar esa decisión.
Los gobernadores JB Pritzker, de Illinois y Gavin Newsom, de California, calificaron el desplazamiento de tropas, contra sus decisiones, como un preocupante signo y abuso de autoridad.
Algunos analistas, comparten esa preocupación por el uso político de la fuerza militar -que Trump intentó desde su primer término-, expresando que más bien, podría tener como propósito intimidar o apagar eventuales protestas, por muy posibles fraudes electorales, en la Elección de Medio Término, en 2026, que es crucial para el futuro del presidente Trump, quien, sin control del Congreso, podría ser enjuiciado y eventualmente removido.
Temores alimentados por la instrucción del presidente al gobernador de Texas, Gregg Abbot y otros gobernadores republicanos, de promover improcedentes redistribuciones de Distritos Electorales en sus estados, pulverizando distritos demócratas, para asegurar más curules, lo que está contenido en el Proyecto 2025, que -tras negarlo en campaña, cuando lo difundimos-, ahora abraza públicamente, y que fue elaborado con base a la experiencia de Viktor Orbán, en Hungría, para eternizarse en el poder.
Control absoluto del poder, no de Trump, que no tiene muchos anos de vida, sino del movimiento ultra-conservador que lo llevó a la Casa Blanca de nuevo, encabezado por Stephen Miller, SubJefe de Gabinete, que comenzó escribiendo discursos, y otros personajes, apoyados por académicos, legisladores y multimillonarios, que lograron en retorno al poder, explotando la simpatía por Trump, quien cada día da mayores muestras de ignorancia, confusión, problemas cognitivos, por lo que aceleran acciones para sustituir la democracia de Estados Unidos, que buscan remplazar por una autocracia, similar a la de Hungría, apoyados en un enorme aparato militar y una compleja red de elementos cibernéticas para controlar a la población.
Parte de eso la campaña, son las campañas de amenazas, intimidación, demandas multimillonarias de Trump a las cadenas de televisión ABC, (que pago 16 millones de dólares al mandatario), igual que a la cadena CBS, a CNN, o amenazas de demanda por 50 mil millones de dólares contra el diario New York Times y otros medios de comunicación.
