El círculo obradorista está encapsulado. Y tiene que saber de dónde llegó el cerrojo. Por eso Gutiérrez dice que están… “En resistencia”
El hijo y la esposa de López Obrador mandan cartas nada más por convivir. Por eso, ni las revisan: tienen que saber quién posee en México recursos y estructura para conocer cuánto gastó él en Japón; y boicotear supuestos planes de vida personal de ella.
¿Quién puede tener tecnología y plantilla para montar un operativo de seguimiento a López Beltrán del otro lado del mundo, y hasta meterse a la contabilidad de un hotel de lujo y obtener las facturas que pagó?
Un plan gigantesco y simultáneo, activado en México y el extranjero para abollar la carrocería política al hijo, cónyuge y al primer círculo de López Obrador: Adán Augusto López, Monreal, Mario Delgado, Octavio Romero.
Con López Beltrán:
–Fueron a Japón y lo captaron en el hotel, comiendo, comprando. Consiguieron sus facturas. Habitación 3205, hotel Okura Tokyo. Gastó 22 mil pesos por noche durante 14 días. Gastó 47 mil 647 por una cena. Gastó 177 mil 067 pesos en el hospedaje.
Con Beatriz Gutiérrez:
–Supieron que tenía una cita oficial para gestionar la ciudadanía española, que su hijo estaba de fiesta en España, facilitaron datos para que se publicara dónde supuestamente viviría en Madrid, y la escuela en la que estudiaría su hijo.
Con Adán Augusto:
–Desde el 14 de febrero pasado, había orden de captura contra su ex jefe policiaco en Tabasco, Hernán Bermúdez. Y que se había fugado del país una semana después. Pero fue hasta el 25 de julio pasado que el gobierno lo informó.
Desde entonces, Adán Augusto perdió todo peso político, porque Bermúdez es acusado de ser líder del cártel “La Barredora”. El escándalo hasta llegó a la portada del diario estadounidense New York Times. Hay que tener alcances para mover algo en el NYT.
Con Mario Delgado:
–Fueron a Portugal a retratarlo en el hotel Pousada, de 822 dólares la noche. Tuvo que explicar su viaje en La Mañanera. Se supo que tiene un depa de 15 millones de pesos y otro de 4.8 millones, pero que rebajó sus precios reales en documentos oficiales.
Con Monreal:
–Fueron a España a retratarlo en el hotel Rosewood Villa Magna, de dos mil 600 dólares la noche. Tuvo que explicar que pagó 100 euros por el desayuno. Antes lo habían captado usando helicóptero privado, en compañía de un impresentable como Pedro Haces.
Con Romero:
–Tras la ruina de Pemex por su gestión como director (Pemex necesita 70 mil millones de dólares sólo para seguir operando, y debe 20 mil millones a proveedores), su nombre apareció en investigaciones en EU.
El círculo obradorista está encapsulado. Y tiene que saber de dónde llegó el cerrojo. Por eso Gutiérrez dice que están…
“En resistencia”.