“Necesito que la gente se entere qué es lo que yo veo de México y cómo creo que podemos arreglar este país”. ¿Con más spots?
Sin pregunta de por medio y pasados los saludos de cortesía, Xóchitl Gálvez encaró a la membresía de Coparmex presente en los “Diálogos por la Democracia”: ¿ustedes creen que me quita el sueño? ¡Pues no!”. Ubicada en el segundo lugar de la carrera presidencial, con apenas 34% de la intención de voto —según Reforma—, la candidata opositora trató de romper la inercia informativa. “Al contrario, eso (la publicación) invita a que redoblemos esfuerzo”.
Con una desventaja de 24 puntos frente a Claudia Sheinbaum, la exsenadora hidalguense descalificó torpemente la información del diario regiomontano. “47% de la gente no contestó la encuesta”, replicó, “y entre los que contestaron, 38% no ha decidido por quién va a votar y 12% podría cambiar su voto”.
Desde muy temprano, el war room de la abanderada de Fuerza y Corazón por México decidió desacreditar al diario capitalino e interpelar la validez de la medición, por la tasa de rechazo. Una lectura somera —y tal vez impertinente— de los números.
“Si creen que una encuesta me va a deprimir, no me conocen. ¡Soy cabrona!”, insistió Xóchitl Gálvez, visiblemente incómoda por la inferioridad en la que se encuentra. Y no solo por las encuestas publicadas en la última quincena –incluidas las de GEA-ISA y de Berumen—; también porque las dirigencias de los partidos que la postularon se quedaron con la mitad del tiempo-aire de la propaganda emitida en los medios electrónicos.
“Necesito que la gente se entere qué es lo que yo veo de México y cómo creo que podemos arreglar este país”. ¿Con más spots?
Derrotar a la 4T —insistió Xóchitl ante los afiliados al sindicato patronal— debe una tarea colectiva. “Los invito a luchar, a ponerse las pilas”, urgió, “yo me estoy jugando todo. Me pude haber quedado en mi zona de confort como empresaria, hacer dinero, estar tranquila (pero) decidí dar la pelea por ustedes, por sus hijos, por su familia”.
Del pase de charola, a la colecta para los espectaculares… y ahora, a una propuesta de promoción combinada que rozó la ilegalidad. “Sepárense dos meses y medio de sus empresas y pónganse a hacer campaña”, suplicó, “convenzan a sus empleados, a la gente de su comunidad. No hay mañana: o autoritarismo o democracia… Los necesito. No timoratos. No miedosos. ¡Pierdan el miedo o nos lleva el carajo!”.
Efectos secundarios
¿INFLEXIBLES? Tres de cada 10 mujeres en México están dispuestas a renunciar a su trabajo, ante la falta de flexibilidad laboral de sus empleadores, según consta en un estudio elaborado por Buk —una compañía tecnológica especializada en la gestión de capital humano en América Latina— en el que queda constancia de que las mujeres en cargos ejecutivos y directivos son quienes en menor medida perciben una mejora en su capacidad de conciliar vida laboral y personal. Además, el 23% de las mujeres señala que su salud mental está peor que hace un año.
¿SIMULACIONES? La semana pasada, dos exintegrantes del gabinete de Alfredo del Mazo cumplieron con el requerimiento de un juez federal y rindieron testimonio sobre la concesión del Viaducto Bicentenario. Muy pronto podría emitirse un citatorio al exsecretario de Educación mexiquense, Gerardo Monroy Serrano, quien deberá responder sobre un probable perjuicio a la Hacienda Pública Federal… por ¡92,964 pesos!, faltantes en la cuenta bancaria en la que la Secretaría de Finanzas del Gobierno del Estado de México administró los recursos del programa para la Inclusión y la Equidad Educativa.
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