El equipo de Xóchitl tiene el reto de caminar cuesta arriba y romper, con mucho trabajo de campo, la burbuja que el presidente López Obrador y su movimiento tiene sobre gran cantidad de los mexicanos y sus altos niveles de aceptación
Luego que Samuel García se bajara de la contienda por la Presidencia de la República después que no consiguió que el Congreso del Estado, pese a todo el novelón que montó, cediera a sus pretensiones de dejar a uno de sus incondicionales para que cuidara que no salieran a la luz los muertos en el armario y la basura debajo de las alfombras, parece que será una elección presidencial de dos, Xóchitl contra Claudia; Claudia contra Xóchitl.
Ambas “suspirantes” presentaron ya a quienes integrarán sus equipos cercanos, sus cuartos de guerra.
Por el lado oficial se repite parte de la alineación que acompañó al presidente López Obrador en 2018: Juan Ramón de la Fuente y Olga Sánchez Cordero, repiten; Tatiana Clouthier regresa como coordinadora de voceros. El equipo tiene incorporaciones de académicos de diversas áreas del conocimiento para dar apariencia de que la “suspirante” oficial es más plural.
El principal reto que tiene Sheinbaum es encontrar la narrativa que convenza a la población de que la continuidad de la 4T es lo mejor para el país. Digo lo anterior porque en 2018 Morena era oposición y podía culpar de todos los problemas al pasado. Pero en este 2024 ese criterio ya no funciona. Todos los problemas que vive actualmente México (creados, inesperados o heredados), son de la 4T, veremos cómo lo resuelven.
Xóchitl Gálvez presentó también a su primer círculo de campaña, en el que tenemos personajes de dulce, de chile y de manteca, todos con una larga trayectoria política dentro de los partidos que forman Fuerza y Corazón por México. Las reacciones a los nombramientos no se hicieron esperar. Personajes de la 4T se apresuraron a calificar al grupo como perdedores y cartuchos quemados.
Al final de la presentación del equipo, la suspirante presidencial dijo que sus hijos (quienes no estaban en el templete) la iban a apoyar para atender a los “Xochilovers” y crear una red para llegar a los jóvenes.
La integración de los hijos de Gálvez le trajo a la “suspirante” una ola de críticas y acusaciones de nepotismo, incluso comunicadores como Carlos Loret de Mola llegaron a comparar este apoyo de los hijos de la candidata como un hecho similar a la “casa gris” (de José Ramón López) o a los contratos que se han llevado los amigos de “Andy”, otro de los vástagos del mandatario.
Creo que esos señalamientos son exagerados, ganas de sacar nota donde sencillamente no la hay. Si dentro de algunos días esos mismos colegas encuentran evidencia de que los hijos de la suspirante gastan dinero de la campaña, o reciben un sueldo, pues otro gallo cantará.
Para lo que sí deben estar preparados los jóvenes y Xóchitl, es para ser cuestionados por la manera de caminar, por el lugar donde se divierten, donde comen y la forma como visten. Por el bien de la familia, espero que resistan.
El equipo de Xóchitl tiene el reto de caminar cuesta arriba y romper, con mucho trabajo de campo, la burbuja que el presidente López Obrador y su movimiento tiene sobre gran cantidad de los mexicanos y sus altos niveles de aceptación.
Lo que sí urge al equipo Gálvez es ponerse a trabajar ya, porque el reloj sigue avanzando y el tiempo y las posibilidades de ganar se acaban minuto a minuto. La mesa ya está servida.
EN EL TINTERO
-Movimiento Ciudadano está en un verdadero problema tras el abandono de la contienda presidencial de Samuel García. El registro del partido peligra, porque no tiene personajes que puedan ser competitivos.
-Al esposo de Xóchitl Gálvez no le gusta la política, pero en algunos momentos tendrá que aparecer para mostrar su apoyo a su esposa y dar la imagen de una familia unida. Espero que sea pronto.
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