En Acapulco maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) y normalistas de la escuela normal rural “Raúl San Isidro Burgos” de Ayotzinapa realizan una marcha por las principales calles, donde exigen la presentación con vida de los 43 normalistas plagiados el pasado 26 de septiembre en el municipio de … Continued
En Acapulco maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) y normalistas de la escuela normal rural “Raúl San Isidro Burgos” de Ayotzinapa realizan una marcha por las principales calles, donde exigen la presentación con vida de los 43 normalistas plagiados el pasado 26 de septiembre en el municipio de Iguala.
Cetegistas y normalistas recorren la costera Miguel Alemán y, mediante amenazas de saqueo a las grandes cadenas de tiendas comerciales como Soriana, Comercial Mexicana y Walmart, provocaron el cierre temporal de estos negocios.
Don Alberto Barrera, un hombre sin piernas y sin manos trabaja en el estacionamiento de Walmart y hoy triste dice que no llevara dinero a su hogar y tampoco tiene dinero para regresar a su casa.
Por su parte, don Luis Puerto, un humilde albañil, dice que ellos exigen justicia, “pero que no afecten a la gente que nada tienen que ver”, señala al increpar que “queremos a los responsables y ellos lo tienen ahí adentro, en Ayotzinapa, porque los líderes o el director los obligaron a salir de la escuela a las marchas o a pedir, que los castiguen a ellos”.
Taxistas y clientes que no pudieron entrar a la tienda se encuentran molestos, también los que se quedaron encerrados y los dejan salir poco a poco para evitar que los inconformes se puedan colar.
Cerraron con rejas de fierro por dentro, no permiten la entrada a nadie y los vigilantes no saben cuanto tiempo permanecerán las tiendas sin abrir. Uno de ellos dicen que “los normalistas son como el lobo feroz, les dicen buuu y todos se espantan”.
Con información de Quadratín
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