Monreal es el único aspirante que transita tanto en una franja del grupo político en el poder, como en otra franja de la oposición
Tras ganarle a Palacio la intermedia en CDMX y la pugna, antier, por la Mesa Directiva del Senado, Monreal es la única carta con la que la oposición tendría posibilidad en 2024. Se ha convertido en “el necesario”, aunque algunos todavía no lo traguen.
“Frente a la incertidumbre, lo peor que puede hacerse es definir el camino de antemano. Al revés, la clave del éxito consiste en tener la flexibilidad necesaria para adaptarnos a escenarios que hoy ni siquiera podemos imaginar. A ponerse flojitos, pues”.
El anterior es un párrafo de Macario Squettino sobre las pasadas elecciones estatales. Pero, encaja para explicar que la oposición está obligada a innovar, pues, ausente y dividida, ha sido incapaz de construir un candidato propio, a un año del periodo electoral.
Desde su lugar como morenista fundador, y operador del partido en el poder en la Cámara Alta, Monreal ha tenido la valentía y el oficio político para enfrentar al presidente, como no ha hecho casi ningún político opositor. Aun cuando desde la oposición es más fácil.
En política no basta con ser querido: hay que ser necesario. Y, en el momento de mayor polarización del país en años, Monreal es el único aspirante que transita tanto en una franja del grupo político en el poder, como en otra franja de la oposición.
Además, de todos modos estará en la boleta de 2024, por alguna fuerza política: tiene operación electoral nacional propia, es plural, defiende la globalización, el equilibrio entre el Estado y el mercado, la división de poderes, la Constitución, y no odia a Estados Unidos.
Y, acotado, excluido y atacado desde Palacio, es, sin embargo, el único aspirante a la candidatura de Morena que avanza en las encuestas para las elecciones de 2024: entre los simpatizantes del partido, pasó de nueve a 12 por ciento en un mes.
Se explica, con información del encuestador de El Financiero, Alejandro Moreno:
Entre la población en general, superó al secretario de Gobernación, pasó de siete a 12 por ciento, mientras Adán A. López quedó en 10 por ciento. En evaluación temas o problemas en lo que se considera que aspirante es el mejor , Monreal salió el mejor en Seguridad Pública, con 12 por ciento, y tiene nueve en Apoyos Sociales.
En Morena, la aspiración de Monreal no tiene salida. Pero ha construido una candidatura natural que la oposición puede aprovechar, aunque ahí algunos no lo quieran: deben entender que en la vida hay que saber dar un paso atrás para dar luego dos adelante.
Tendrían que empezar a arroparlo. Arrojo le sobra. Por ejemplo, fue a la presentación del libro de Luis Estrada sobre “mentiras y frases populistas” del presidente en sus conferencias matutinas.
Pedir más…
Es mucho.
Minuto a minuto
